Sipote chisme, no j…
Alguien afirma con clara percepción que una de las fuerzas más
destructivas de la naturaleza es el chisme o mejor su figura universal, el
chismorreo, acudiendo en esta ocasión a relievar el acto con el termino
“sipote” tan utilizado en la costa colombiana para relievar con aclamación un
hecho que por su incidencia llama la atención.
Oye, compae…ven pa’ca que te tengo ‘sipote” crónica. Que pasó
“hegmano”?, le replica el otro, con un notorio acento de los antiguamente
llamados en Colombia “turcos”. Pues esta noche debuta como cantante la señora
del corregidor. Pues como asi??? Y eso que tiene de raro, si ella ha
estado de “buta” toda su vida.
Así pues, el chisme al nacer se vuelve tan viral que ataca y se
propaga haciendo estragos por doquier, basado en historias ficticias o reales,
que no ameritan ser difundidas con tanta sevicia pero que, en unos casos
solamente y por el desagradable oficio de “chismear”, es demasiado el daño que
se le ocasiona a los afectados con el maledicente rumor.
De lo anterior resulta pertinente concluir que es mejor no juzgar
para no ser juzgados, recordando con frecuencia el refrán que dice que “en boca
cerrada no entran moscas”, lo cual sería quizás el mejor de los métodos para
prevenir la práctica tan dañina y tenebrosa que generan los chismes.
Miami, Noviembre 12 de 2015
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