E N M I
O P I N I O N
Resulta
ser que una pareja se fue de vacaciones por dos semanas y a los tres días uno
de los dos dijo algo al otro que no le gustó y ,en vez de aplicar el conocido
término “me importa un comino" , se quedaron ambos sin hablar ni una sola
palabra hasta el final de su paseo, privándose así ambos de pasar un buen rato
juntos.
Lo
mejor de todo esto es que cuando estaban ya camino a su casa sucedió algo
inesperado y ello fue que al carro se le murió la batería y entonces los dos
tuvieron que ponerse juntos a la tarea de , el uno empujar, y la otra manejar
el carro, para que este pudiera prender. Que paso entonces? Pues que les tocó
hablarse el uno al otro, al comienzo ambos fríos, para ya al continuar su
regreso departir como de costumbres causándoles incluso risa la tontería de
haber pasado tan maluco por una simple tontería.
Esto
sucedió a esta pareja y se me ocurre pensar que le ocurre a mucha gente que se
envuelve en discusiones tontas en las cuales cada quien pretende tener la
razón, y en las que, el ego y la soberbia de cada cual, dan al traste con
momentos de felicidad que ingenua y tontamente se dejan pasar. De ahí la
importancia de la buena comunicación y de que, si se presentan divergencias
normales en una relación, no permitir que ellas se suban demasiado a la cabeza
ni que el sentimiento negativo consecuente dure demasiado.
Miami,
Septiembre 27 de 2014
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